
Vecinos de los jirones El Comercio y Chépen, ubicados en el centro histórico de Cajamarca, han manifestado su creciente preocupación por las obras de remodelación que se están llevando a cabo en estas importantes arterias viales. Según los residentes, las intervenciones han generado interrupciones significativas en el tráfico vehicular, afectando la movilidad de los ciudadanos y poniendo en riesgo la seguridad de los estudiantes que asisten a los colegios San Ramón y Rafael Loayza.
Las obras, que incluyen la instalación de nuevas redes de agua potable y alcantarillado, así como la mejora de la infraestructura urbana, han provocado el cierre parcial de las vías y la desorganización del tránsito. Esta situación se ve agravada por la falta de señalización adecuada y la escasa coordinación entre las autoridades municipales y los vecinos.
Los padres de familia y docentes de los mencionados colegios han expresado su preocupación por el aumento de accidentes de tránsito en las inmediaciones de las instituciones educativas. «Los estudiantes deben cruzar calles con maquinaria pesada y vehículos en movimiento, lo que representa un peligro latente para su integridad», señaló una madre de familia.
Ante esta situación, los vecinos han solicitado una reunión urgente con las autoridades municipales y responsables de las obras para exigir la implementación de medidas que garanticen la seguridad vial y la adecuada circulación en la zona. Además, han propuesto la colocación de señalización temporal, la restricción del paso de vehículos pesados durante las horas de ingreso y salida de los estudiantes, y la asignación de personal de seguridad en los puntos críticos.
La situación continúa siendo monitoreada por las autoridades locales, quienes han instado a la población a mantener la calma y a colaborar con las indicaciones de tránsito mientras se culminan las obras en la zona.